Poemas en una jornada de reflexión

 

Madurez perdida

Cuanto tiempo aprendiendo,

cuanto tiempo encontrándote,

tarde vas llegando a la vida,

al amor.

Cuan tarde comprendiste

que la edad de oro,

fue el sueño de alguien,

nunca la encontraste,

nunca la encontraras,

obsesionado estaba

buscando el perfume de tu vida,

Ninguna primavera deshojaras una flor,

ningún verano tomaras rayos de sol,

ningún otoño veras

las mil gamas de colores

de las hojas al caer.

No sentirás jamás

la dulzura de los pétalos,

ni su lento caer

en los brazos de tu amada.

No encontraste mujeres

que tu soledad acompañaran,

solo te conformas

con un gotas de ternura,

que te consuele

de tanta amargura,

del dolor profundo,

de tu madurez perdida.

 

Tan lejos, tan cerca

Ha llegado el tiempo,

que el dolor te inunda tu cuerpo,

todo te afecta,

todo te hace daño,

lámparas inútiles quieren darte la luz,

sientes que tu vida tiempos de pérdidas fueron.

no es tiempo más de lamentos,

tiempos de buscar lámparas nuevas,

tratar no llegas

a ningún puerto,

tu inteligencia

naufragada se siente,

donde tu soledad

es la medida de tu tiempo.

Cuando lejos estas

parada de la esperanza,

manto protector buscado,

que mi soledad aflija,

acompañadme amigos

dicha parada,

tanta angustia,

tanta tristeza protectora

te tienen los ojos e carne viva,

tan lejos, tan cerca,

rozar tus pliegues

quisiera ya.

Nadie duerme ya

Nadie duerme ya,

nadie la paz encuentra,

bestias feroces

circulan por la cuidad,

diciéndote que eres feliz.

yo muerto de mi miedo,

me arremolino en mi cama.

nadie duerme en la ciudad,

cadáveres en vida,

por la ciudad circulan,

despojos nuestros,

despojos vuestros

son sus sustentos,

sueños ya no tienen

la gente de mi ciudad.

andando entre esponjas voy,

luces cegadoras

cierran mis ojos,

no quieren siquiera

llorar por tanto dolor,

prohibido llorar dice

en este paraíso,

en el que nadie alegre esta.

Algunos locos

musgo andan poniendo,

dicen que así

la luz de luna

reflejada quedara,

miles de ojos

prendados quedan de tamaña belleza,

tus huellas impresas quedan en la ciudad,

tu vida controlada, que algún día

contra ti usaran,

así creen que tu dócil serás,

no saben que con otros

construyendo puentes andan,

puentes que ellos no ven,

dolores que aliviar quieres,

levantaremos pronto

el muro contra la desvergüenza.

Luces antiguas, luces modernas,

cerrando los ojos van,

abrirte los ojos

quiero yo,

que nadie duerma,

lanzar barco de la vida,

Para que la luz de luna

Nos haga ver el veneno, las calaveras,

las copas imaginarias,

las comidas suculentas,

encendamos las velas

que hagan ver

la cara horrenda de tanto desalmado.