Al calor de las noticias (ocho de septiembre del 2016)
Ya andamos a jueves, en otros tiempos esto hubiera sido un día festivo para mí, pero esos tiempos pasaron, y ahora ando en otras cuitas, entre la esperanza y el pesimismo bien radicados en mi estado de ánimo, viendo como todo un edificio de ilusiones se fueron perdiendo en la noche de los tiempos, pero quien esperen, que este heterodoxo comunista caiga el cielo ilusionador de la eterna arcadia feliz capitalista, de las ilusiones nacionales de pueblos oprimidos, del eterno canto a revolucionarios impostados, que camina asaltando los cielos, pero no sabiendo vislumbrar que duros tiempos viven los oprimidos de este mundo, y por aquí andamos dando buena cuenta de ello, donde la ronda de conversaciones de Sánchez, la secuelas de Soria, que la Diada se acerca, y todo lo que rodea a los devenires catalanes, y donde las noticias económicas e internacionales deben tener un espacio, en el día de hoy. Antes de ello, contemos la felicidad que le embarga a El País, en tanto que una de las referen