Al calor de las noticias (uno de mayo del 2017)

Hoy andamos a primero de mayo, acudiremos a una manifestación, con más dolores, que alegrías, y donde nuestro quiosco, pone sus ojos en el mundo laboral, pero de aquella manera, y donde el peso de las corruptelas es mucho menor, ecos internacionales, de los que tendremos que dar cuenta, pero donde algún diario se ha puesto a hacer campaña electoral, en las primarias socialistas, lo hace hoy ABC (“Díaz espera derrotar a Sánchez por 20.000 votos. La presidenta andaluza fía su victoria a lograr tres de cada cuatro sufragios en Andalucía, y suficiente ventaja en Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha”; al tiempo que el quiosco barcelonés pone el grito en el cielo por las colas formadas en su aeropuerto, por la mala adecuación a las nuevas normas de la UE (La Vanguardia: “Indignación en El Prat por las colas en el control de pasaportes”; El  Periódico: “Caos en el aeropuerto de Barcelona”; “Los discapacitados piden que la nueva ley sancione la discriminación”; Ara: “Colas de tres horas y pérdidas de vuelos en El Prat”), siendo El Periódico, el único que ha hecho editorial, a cuenta de ello (“Los nuevos controles en los aeropuertos”).

En otro orden de cosas, en La Razón, se nos anuncia que  Pedro Horrach, abandona la Fiscalía (La Razón: “ Horrach: “Soy consciente de que me voy al lado oscuro”; al tiempo que en el mundo se hace amplio despliegue en torno a Aramburu y su novela (El Mundo “Fernando Aramburu: “Paz hay en Alemania, que ya no niega su pasado”), al tiempo que entrevista, también, Iñaki Gabilondo, que manifiesta que “el periodismo hizo en la transición un emplasto con la política”, en la que aborda la crisis periodística, pero no se hace el suficiente hincapié en los que mecen la cuna”.

En cuanto al quiosco barcelonés, se deja constancia, que “los delitos contra mayores de 65 años crecieron un 27% en Catalunya”; al tiempo que nos cuentan que “entra en vigor la tasa catalana sobre bebidas azucaradas”; por su parte, crónica laudatoria a un mecenas (“Planidura, un industrial obsesionado por el arte”), al tiempo que recoge la gran fiesta de los “castellets” anda ya cercana (“Dimensión desconocida”)

Yendo ahora, a las páginas del diario El Mundo, se nos cuenta de que esta semana se celebra una importante reunión, El Consejo Fiscal aborda esta semana la ofensiva de Moix contra fiscales barceloneses y de la Audiencia Nacional, a cuenta de sus actuaciones en el Caso Lezo  y Pujol (“Los fiscales se rebelan contra las injerencias del Gobierno”);  en cambio los ojos, en El País, se trasladan a que nos cuenta que el PP ha creado una oficina interna para luchar contra la corrupción entre sus filas, llevado por las andanzas madrileñas, ahora nos dicen que van a vigilar más a sus responsables, se puede decir dos cosas, o bien “a buenas horas mangas verdes”, o bien, adoptar la postura más racional, la de Santo Tomás, “verlo, para creerlo” (“El PP crea una oficina interna de lucha contra la corrupción”).

Y como La Razón, tirando de sus encuestas “ad hoc”, se da un baño de autosatisfacción, diciendo que andan a punto de “conquistar” la capital madrileña (: “La corrupción no desgasta al PP: sube y podría gobernar el Ayuntamiento de Madrid con Cs”), y por supuesto, como en la grande ocasión, editorial, a renglón seguido, para proclamar lo bien que les va a los del PP (“La marca PP resiste en Madrid”).

Añadan ahora, que cuando algunos se toman en serio los informes de los grandes grupos consultores, les recomiendo la lectura de la crónica leída en El Mundo, nos cuentan que “El juez dice que PwC obtuvo un contrato inflado por financiar al PP de Madrid”, pero claro estas conductas de entres privados, no tienen la trascendencia, que deberían tener, acaso podíamos ver una cierta tendencia a la doble vara de medir.

En otro orden de cosas, hoy en El País, nos cuentan que ha quedado Reabierta la causa contra López Madrid y el comisario Villarejo”, en la causa instada por una denuncia de la doctora Elisa Pinto; y rizando el rizo de la estupidez humana, nos llega la noticia, en El País, que “directivos de grandes empresas aprenden a prevenir el delito”, pues vayan poniendo sus ropas a lavar, empezando por hacer desaparecer los paraísos fiscales, que sin su generosa ayuda, indudablemente no existirían, panda de hipócritas, su hedor es intolerable; pero aquí no queda las muestras de la podredumbre de muchos dirigentes, ahora debo añadir, que el Vicepresidente de la UE, Jyrki Katainen nos dice que “con más medidas anticorrupción España crearía más empleo”, alguna evidencia de ello, no, pero tengan por seguro, que si hace falta, harán sesudos informes para revelarnos “la verdad”.

De otro lado, en La Vanguardia, se destaca que “el PNV ultima su acuerdo más ventajoso con Rajoy”; al tiempo que destaca, este diario que “los nacionalistas eluden los escándalos de corrupción en aras del pragmatismo, mientras que ya La Razón mira más allá del debate presupuestario (“El PP asume que Rivera pasará a la ofensiva para desgastar a Rajoy tras aprobar los PGE”), concluyendo este párrafo, contando que “España y Portugal son los países con menos inversión pública de la UE” (El País), con lo que ya vamos directos a los ecos internacionales.

En  cuanto a los ecos internacionales, comenzamos por Francia, donde El País destaca que “Le Pen busca romper el pacto que aísla al Frente Nacional”; mientras que La Vanguardia refleja que  “Macron mantiene la distancia, pero sube el temor a la abstención”; al tiempo que hay que decir, que la ultraderechista dice que va a realizar una consulta en 2018 para dejar la UE, si gana las elecciones presidenciales francesas, mientras todas las crónicas resalta que va creciendo en los sondeos; de otro lado, se destaca que May, asume que la negociación del Brexit “será dura” (El País: “May, inflexible con la UE: Es mejor no tener acuerdo que un mal acuerdo”), al tiempo que se deja constancia de la amplia victoria de Matteo Renzi en la primarias del Partido Democrático italiano (El  Paródico: “Renzi vuelve a encabezar la izquierda italiana”; El País: “Renzi  barre en las primarias del PD”; El Punt Avui: “Matteo Renzi recupera el timón del partido demócrata”; El Punt Avui: “Aglomeraciones El Prat”); y terminaremos este párrafo, con un editorial duro, sobre el reaccionario dirigente húngaro (“Actúen contra Orban”), exigiendo a los populares europeos que le expulsen de su organización

Estados Unidos añade presión a la escalada militar con Pyongyang. Washington no descarta usar la fuerza si hay más pruebas nucleares (La Razón: “Trump da un paso más en el conflicto nuclear con Corea del Norte”); al tiempo que Donald Trump redobla su ataque a la prensa y amenaza con endurecer las leyes sobre difamación, y donde una columna en El País (“La lección que nos enseña Trump”, John Carlin), y el editorial, en El Mundo, enfatiza que “Trump se somete a los límites de su poder tras 100 días de mandato”.

Acabamos hoy, con mis ojos puesto en el primero de mayo, en donde más que noticias, nos encontramos  con reflexiones editoriales, donde el quiosco madrileño, le ha dado por ofrecer sus consejos a los sindicatos, para que vayan por la correcta senda, en ese sentido, el editorial leído en El País (“La tarea de los sindicatos”), donde El Mundos nos refleja “la marcha de los sindicatos hacia la irrelevancia”), donde aparte de ofrecer datos reales, como la perdida de afiliación (un medio millón desde la reforma laboral),  donde ha sido llevado, tanto por sus dirigentes, como otras causas, en las que no entra su editorial (“Los sindicatos deben renovarse”

Mientras que La Razón no puede ocultar sus profundas alegrías, obviando a los sindicatos, dado que andamos, como dice su editorial, con “un primero de mayo con mayor empleo”, o como ABC que nos dice que “el sindicalismo tiene que asumir su responsabilidad para garantizar la recuperación”, ya que según su otro editorial “la mejor política social es impulsar y favorecer el crecimiento económico”, como dice a cuenta del Programa de Estabilidad remitido por el gobierno.

Yendo ahora al quiosco barcelonés, en La Vanguardia, en su editorial, se pide y se reclama que los poderes públicos deben combatir “por un mayor y mejor empleo”; siendo el mismo tono que respira El Punt Avui (“Estabilidad, salarios y formación”), reflejando en su portada que nos dirigimos hacia “hacia un mercado laboral más flexible”).

Con otros ojos mira el este mundo, El Periódico, que resalta que  “Los trabajadores exigen recuperar sus salarios”, donde su motivación, es que el actual mercado laboral, no puede seguir en esta tesitura, en tanto que nos lleva a la quiebra social y económica, como se mantiene en el editorial (“El trabajo, a la cola de la recuperación”); y donde Ara aborda el futuro del mundo laboral, como es la robotización (“Robots: amenaza u oportunidad”), y donde afirman que “la nueva clase trabajadora ya está aquí”, por supuesto que de ello hacen su correspondiente editorial, lleno de optimismo (“Robotización en el mundo laboral: hagamos una oportunidad”).

Varias cosas levantan mis fibras, de una parte, los “consejos” del camino a andar, siendo evidente que los sindicatos necesitan de un repensar y un debate sobre el rumbo, que pretende dar; al tiempo que me desagrada la fijación con la corrupción, que siendo evidente, que es un problema, no debe ser un eje de las manifestaciones, y eso es lo que  nos ha llegado, dado que el real problema  es el problema de las condiciones del trabajo, tanto en el seno del centro de trabajo, como el acceso al mismo.

Asimismo con respecto a lo dicho por El Periódico, es que diciendo una parte de verdad, la crisis social, mantengo que la pretendida emergencia económica, que puede ocurrir,  no existe como tal, sino que la existencia de trabajadores pobres es la solución buscada por el actual capitalismo, es así de duro y cruel, y señores de Ara, me apena que sigan la estela de los pensadores del fin del trabajo, por favor, miren y observen si existe esa cosa que llaman el fin del trabajo, otra cosa, es que la robotización no sea real, pero no será una oportunidad, en tanto que los medios de producción anden en  manos de los capitalistas, y no en manos de la sociedad, y no es eso lo que propugnan en su editorial, ahora me tocará ir la manifestación, lo hare en silencio y solitario, debo hace homenaje a todos aquellos que lucharon, por un mundo mejor, y por humanizar los centros de trabajo, soy un deudor de sus luchas.