Al calor de las noticias (ocho de abril del 2017)

En esta mañana sabatina del mes de abril, de mis miedos, mis pesadumbres, mis muchas dudas, me enfrento a las portadas del quiosco, donde, como era previsible, son cuatro grandes bloques a los que me debo afrontar, hoy los devenires catalanes giran alrededor de un viaje de Puigdemont, seguidamente habrá que dar cuenta del desarme etarra, para luego pasar a un atentado en Estocolmo, para concluir con el bombardeo en territorio soberano Sirio por parte estadounidense, que nos servirá como colofón, de que espero un breve, pero con intensas consideraciones, sobre todo, con lo ocurrido en Siria, en tanto que nuestra afamada prensa, otra vez más, no tiene el más mínimo sentido crítico, sobre lo que supone, en mi opinión, de un salto cualitativo de enorme importancia, mientras habrá que seguir dando cuenta de las correrías del sujeto Rato, que abordaré en breve, antes de ello, habremos de dar cuenta de la entrevista, en El País, al ‘premier’ gibraltareño  (“Fabian Picardo, ministro principal del Peñón: 'Londres me asegura que sin Gibraltar no habrá pacto con la UE'“); siguiendo ojeando, nos vamos, de momento al quiosco barcelonés, para hacer constancia que hoy Ara lleva aportada que las indemnizaciones del accidente del Germanwings, conseguidas en acuerdos extrajudiciales, van a tributar l 48%  (“La factura oculta de Germanwings”), al tiempo que, en El Punt Avui, se nos da cuenta de una de nuestras pesadillas consumistas (“La telefonía, la pesadilla de los consumidores”); por su parte, en El  Periódico, para darnos cuenta que “Los humoristas plantan cara por la libertad de expresión”, y donde hace una recapitulación sobre la situación de la minoría gitana, en un editorial, titulado “El Día del Pueblo Gitano”; en tanto que viniendo al quiosco madrileño El País, a cuenta de las cuitas socialistas, refleja que “Fernández pide no cuestionar la legitimidad de las primarias”; al tiempo que, en El Mundo, nos dice, que por mor del control para evitar noticias falsas, una red social ha perdido sus señas de identidad (“¿Y si Facebook deja de ser Facebook?”, al tiempo que les digo el famoso posmoderno Rubén Amón ha escrito un artículo sobe el aniversario de la legalización del PCE, manifiestamente prescindible, del cual se hace llamada en portada (“Aquel PCE al que tanto quisimos y tan poco votamos”)-

 En otras circunstancias, necesariamente hubiera sido algo más extenso sobre los devenires griegos, en tanto que el Eurogrupo alcanza un principio de acuerdo sobre el rescate de Grecia, o como a las autoridades europeas siguen dando largas sobre la idea de crear un gran 'banco malo', o como, en La Vanguardia, se recalca, en un editorial, que los valencianos  se sienten desatendido (“El enfado de los valencianos”), donde otro día, sería motivo de elevar mis preocupaciones de seguir en el tiovivo de los agravios territoriales.

Ahora toca hablar de las andanzas Rato, al que, en expresión popular, donde me crie, sería calificado de pieza o alhaja, toda vez que nos dan cuenta, que las empresas familiares de Rodrigo Rato (hasta cinco) facturaron durante 15 años 82 millones de euros a nueve compañías privatizadas, ,entre ellas Aldeasa, BBVA, Endesa, Azucarera Española, Iberia, Telefónica, Retevisión, Repsol, Logista (Tabacalera), y donde una sigue siendo pública (Paradores), y aquí viene la importante, que casi 30 millones se facturaron siendo Rato vicepresidente del Gobierno, entre 1998 y 2004. (El Mundo: “Sociedades de Rato facturaron 82 millones a las privatizadas”).

 De los ecos catalanes, todo gira alrededor en torno a una entrevista entre Puigdemont y Carter, donde El Mundo nos apunta que “Puigdemont viaja en secreto a EEUU para ‘fichar' a Carter’”, mientras que El Periódico nos habla que “Puigdemont busca en Carter un aliado del ‘procés’”, al tiempo que La Vanguardia destaca que Puigdemont vuelve a EEUU en secreto para verse con Jimmy Carter”; y una aduladora crónica,  nos cuenta El Punt Avui, que “Puigdemont explica el proceso a Jimmy Carter”; en otro orden de cosas, este mismo diario, nos cuenta que “nace el partido de Colau, y Podemos queda fuera”.

Por lo demás, toca contar, que la prensa con división de opiniones el desarme de ETA, pero antes de ello digamos que el Gobierno exige a ETA su disolución y advierte de que “no va a obtener nada” por desarmarse,  y donde El Mundo subraya que ETA intenta convertir la entrega de las armas “en un acto de propagada”, titulando  “La última farsa de ETA”, añadiendo que “Urkullu y Barkos se reunieron hace tres días con los verificadores”; en este sentido, ABC dice que “ETA intenta blanquear hoy en Bayona medio siglo de terrorismo”; mientras, La Razón habla de “simulacro de desarme”, y recuerda “los otros 8 de abril negros de ETA”.; de otro lado, La Vanguardia señala que “ETA escenifica hoy la entrega de su arsenal sin el aval de España ni Francia”; según El Periódico, “ETA culmina hoy su desarme unilateral y sin contrapartidas”; concluyendo con el escueto titular de Ara, que dice que “ETA Entrega armas”.

No siendo menor el abismo que separa el editorial de La Razón' (“Sin verificación judicial no hay desarme”) del de 'Ara' (“ETA se desarma y la paz se reafirma, pero algunos no se dan por aludidos”), con lo cual debemos añadir un episodio más, para llevarlo al museo de los horrores, sería la primera vez en la historia, que los tribunales hicieran una verificación, pero esta son las cosas, que adornan a semejantes e ilustres poseedores de los arcanos de la verdad, son las cosas, que ocurren en estas tierras, prueba evidente, de que hemos alcanzado el extraordinario suceso de ver los burros volando, dicho sea de paso, afirmación con toda la ironía posible.

Ahora ya viajamos fuera de nuestros pequeños confines, para dar cuenta que al menos cuatro muertos y una decena de heridos al arrollar un camión a una multitud en Estocolmo, en otro acto realizado en el paroxismo del fanatismo salafista, tocándole en esta ocasión a Estocolmo, en este Europa, tan llena de miedos, que queriendo ser segura, con leyes draconianas, que bordean los estados de emergencia, se evidencia  que eso es sueño imposible, el de la seguridad, no se dan cuenta que el ser humano es capaz de lo mejor y de lo peor, y donde nuevamente asistimos al infame espectáculo de cortes de programación, en ese afán de instantaneidad, tan del gusto del posmodernismo, dándome la impresión que es el vehículo de propalación necesario que los fanáticos salafistas pretenden, se ha perdido el sentido de la proporcionalidad, en todos los ámbitos (El País: “Los terroristas vuelven a utilizar un camión para una matanza en Suecia”; El Mundo: “Estocolmo tampoco se libra del terror”; La Razón: “Terror en el centro de Estocolmo”; La Vanguardia: “Un camión arrolla a una multitud en Estocolmo y causa cuatro muertos”;  El Periódico: Terrorismo con camión en Suecia”; Ara: “Niza, Berlín, Londres ... y ahora Estocolmo”; EL Punt Avui: “Golpe terrorista en Estocolmo”; y que ha sido objeto de editoriales en El País (“Ahora, Estocolmo”), en ABC (“Contra el terrorismo no basta prevenir”), en El Punt Avui: “La violencia que se multiplica

Ahora entramos en el bombardeo de un estado soberano, sin mandato legal alguno, con la plena aquiescencia de los socios europeos y la OTAN y abre una crisis con Moscú, y el regocijo general del quiosco, donde nadie cuestiona, una operación destinada de cara al exterior y el interior, para que  se den cuenta, quien tiene la sartén por el mango, y donde casualmente el ataño populista se va acercando a un verdadero líder internacional, tan del gusto de estos pagos, que parece que no se da cuenta por donde vienes los tiros, y de lo que representa este paso cualitativo (El País: “EEUU ataca por primera vez a las fuerzas de El Asad en Siria”;  ABC: “Trump marca en Siria las nuevas líneas rojas de EEUU”; La Razón “Los EEUU de Trump entran en guerra”; La Vanguardia: “El ataque de Trump a Siria dispara la tensión con Rusia”; El Periódico: “Trump ataca a Siria para mantener a raya a Asad”; Ara: “Trump cambia el guion en Siria”; El Punt Avui: “Trump ataca Siria y tensa la relación con el Kremlin”); como es obvio gran movilización en el quiosco madrileño (El País: “Trump responde a Siria”; ABC: “Trump toma la iniciativa en Siria”; El Mundo: “Una respuesta proporcionada a las atrocidades de Bashar Asad”; La Razón: “Un mensaje muy nítido de Trump”), y donde se reservan editoriales Ara y El Punt Avui en el quiosco barcelonés (El Periódico:  “El ataque de Trump en Siria”; La Vanguardia: “Trump toma la iniciativa en Siria”), podía abalanzarme sobre cualquiera de ellos,  enfadarme, pero mi intención hoy es elaborar una crónica periodística, sobre lo que supone  lo ocurrido ayer, todo ellos al calor de los resúmenes, que vengo realizando.

Debemos recordar que en el mes de febrero, se produjo una reestructuración del National Security Council, órgano consultivo del presidente, donde participaban militares, herederos de la administración Obama, produciéndose entones el encubrimiento de Steve Bannon, que fue el vencedor, produciéndose la retirada de algunos a sus cuarteles de invierno, pero este hombre más preocupado por los negocios del presidente, no ha podido evitar que, otro fuera ganando terreno, de pronto la prensa nos cuenta que de ese órgano consultivo es desalojado Bannon, pasando a ser el hombre fuerte el teniente general McMaster, un veterano de la guerra de Irak, lo que ha posibilitado la vuelta de la vieja guardia existente antes del relevo de los presidentes.

Ahora lectores les quiero recordar algo, sucedido en el año  2013, año en que Obama consideró que Asad había pasado las líneas rojas por la utilización de armas químicas, en un ataque sobre civiles sirios, quedando claro que el régimen sirio no  tuvo participación; algo debió ocurrir en bastidores, pero Obama freno las apetencias militares, pero tras esta crisis de días pasados el mencionado teniente general, se ha convertido en el hombre fuerte del Pentágono, siendo una de las obsesiones principales que el enemigo a batir en la zona es Irán, y me dirán que tiene que ver esto con lo ocurrido, pues mucho lectores, que esto no es un aviso para Assad, como dicen los diarios de  hoy, es una aviso a navegantes, que deja pequeña a Siria, con otro componente nada despreciable, como es que los asuntos militares lo deciden los militares, donde la persona interpuesta puede dedicare a sus “negocios”, que para ellos queda también los asuntos internacionales, lo cual podríamos a calificar, como que se ha producido un golpe de estado blando, lo cual hace pensar que  los tambores de guerra suenan más fuertes que nunca, por ello, hoy como ayer: “Guerra a la guerra por la guerra” (Rafael Alberti), todas las alarmas han saltado, el postureo continúa.