Al calor de las noticias (dos de marzo del 2017)

A cada día, a cada mes que pasa, uno leyendo lo que ha escrito hace unos días, se cree que ha quedado corto, pero así prefiero navegar por este mar de aguas embravecidas, en que ha convertido el quiosco, para verificar, que las decisiones tomadas desde sus redacciones les llevan a tomar decisiones radicalmente distantes con la realidad, nadie parece dispuesto a abandonar su senda, aunque solo fuera para hacer un breve quiebro, y claro, esta bola anda creciendo y creciendo, lo cual no cabe duda, que algún día, les hará recapacitar a los directores, que pululan a ambos lados del Ebro, perdonen este comienzo, pero que un premio de arquitectura, sirva para exhibir sus espadas de esencias nacionales, me causa más que preocupación ya, un profundo dolor, y es el premio a tres arquitectos de Olot has sido premiados por el Pritzker, el catalogado como el Nobel de los arquitectos, y viendo las presentaciones en las portadas, uno puede sentir más que una profunda vergüenza, Hay quien les presenta a ellos, a toda castaña o como foto pie (Ara: “El Nobel de la Arquitectura”; El Mundo: “Somos la antítesis de los arquitectos estrella’”); hay quien dice que se distingue al estudio RCR de Olot (El País: El Pritzker premia a los arquitectos RCR de Olot”; El Periódico: ); hay quien titula que un estudio catalán gana el 'nobel' de arquitectura (El Punt Avui: “Un estudio catalán, nobel de arquitectura”; La Vanguardia: “Un estudio catalán gana el 'Nobel' de arquitectura”); y hay quien da la nota para poner el acento en... España: “España conquista su segundo 'nobel de arquitectura' (ABC) y “El Pritzker vuelve a España y premia al estudio RCR de Gerona” (La Razón); al tiempo que se hacen sendos editoriales en el quiosco barcelonés, uno en La Vanguardia (“Raíces y alas”), el otro en Ara (“El premio Pritzker en RCR muestra la excelencia de la arquitectura catalana”), tan orgulloso de sus esencias nacionales, cuando en sus páginas denuncia el españolismo, que aquí mismo podido leer, dan ganas de liarse a gorrazos
Pero, como esto, jamás puede quedar ahí, en este simpar mundo, pues tenemos más caldo, para abochornarnos, hoy en El Punt Avui, el gran titular se reserva a que el año que viene tendrán nueva tarjeta de transporte (“La nueva tarjeta de transporte, el año que viene”), y donde sus fervores nacionales, salen hoy a pasear a cuenta del juicio a Homs y una sentencia absolutoria de un maldito tribunal españolista ([Homs:] “La sentencia marcará las relaciones”; “La denuncia por la estelada de Berga, archivada”), y para que quede algo de consuelo en el quiosco barcelonés, decirles que hoy El País ha tenido a bien que se lleve a portada que “aspirantes a policía cene un test de ortografía”; y dado que los “progresistas” hombres de este diario, en otro alarde de buenismo, y del siente usted a su mesa a un pobre, nos anuncian un campaña para enardecer el apoyo a los refugiados, con estos predicamentos, a lo mejor, ya podríamos a comprender, como se puede a inyectar en vena la gangrena del odio al extranjero (““La odisea de los nuevos europeos”)
Y como acabemos de leer con los arquitectos, podemos comprender algo mejor, el comportamiento grosero y nauseabundo de algunos titulares, de algunas crónicas, todo ello viene a cuento, en el día de hoy, con la secuela de que el acusado Montull puede empezar a cantar en el juicio del caso Palau, y teniendo hoy, otra pata, con la que contrastarse, y los dos tienen las mismas esencias, como el que se reabre la investigación de la caja B del PP, cuando no digamos referencia de portada, es que esos diarios ha preferido mantenerse en silencio, del que ellos son responsables, siendo hora, que expliquen a los ciudadanos confundidos y aturdidos, de que nos expliquen sus criterios periodísticos, esto viene a cuento  que los abogados próximos a los convergentes o ex convergentes han tomado la decisión de no llevar a 36 testigos (El País: “La confesión de Montull altera la estrategia de Convergència”; Ara 'CDC retira el testimonio de 36 cargos políticos del juicio del caso Palau'; La Vanguardia: “Montull señalará al extesorero de CDC en el cobro de comisiones del Palau”; El Periódico: “‘Será muy divertido'. Montull sugiere que el pacto para salvar a su hija a cambio de incriminar a CDC está hecho”); más hay algunos que prefieren vivir en su mundo (La Razón: “Puigdemont se va a EEUU para vender el ‘procés’ acosado por la corrupción”); y hacer de ello un editorial (“Pantomima viajera de Puigdemont”), otros se limitan hoy y solamente hoy a decir que se sentarán en el banquillo (El Punt Avui: “Por fin, en el banquillo”).
De otra parte tenemos que el juez José de la Mata decidió ayer reabrir la investigación sobre la contabilidad opaca del PP, que su antecesor en la Audiencia Nacional, Pablo Ruz, concluyó en marzo de 2015 y que siguen pendientes de juicio; la reapertura de la causa obedece a la confesión de Francisco Correa, quien declaró ante el tribunal del caso Gürtel que se repartió con el extesorero del PP Luis Bárcenas comisiones de grandes constructoras adjudicatarias de contratos del Estado (La Vanguardia: “El juez reabre el caso sobre la financiación del PP”; El Periódico: “Reabierta la investigación judicial de la caja b del PP”; La Razón: “La Audiencia reabre el caso de la caja b del PP y llama a declarar a Correa”); pero a esto hay que añadir que algo sigue ocurriendo por Murcia, donde todo parece que el PP sigue enclavado en su territorio preferido (La Razón: “El presidente de Murcia reiterará hoy a Ciudadanos que no dimitirá”).
Pero como venimos observando, en cada caso de estos, un nuevo girón en el mundo judicial se produce, hoy lo tenemos en una doble vertiente, de una parte, comparecencia del nuevo fiscal general, a deriva de la judicatura solo parece hoy asunto de Estado para El Mundo y El País, en donde denuncian editorialmente, que no despejen dudas sobre su imparcialidad e independencia, el primero lo titula que “La oposición reprocha a Maza que deje dudas sobre su imparcialidad”; el segundo “Explicaciones insatisfactorias”; pero como la cosa no puede quedar ahí, tenemos que hoy, que debemos dar cuento del preacuerdo de PP y PSOE para repartirse los cuatro cargos a renovar en el Constitucional, lo que incluiría la renuncia socialista a vetar que quien fue 17 años diputado de Aznar y Rajoy en el Congreso, el opusdeísta Ollero, pueda encaramarse a la presidencia, donde El Mundo, el único que lo lleva a portada, refleja que “PP y PSOE se aferran a sus cuotas en el Constitucional”; según El País PP y PSOE “imponen sus candidatos al Constitucional”; “PP y PSOE consuman el pacto para el nuevo TC” ha subrayado La Vanguardia, mientras que El Periódico apunta que PP y PSOE “se reparten 4 plazas del Constitucional”, eso sí, si profundizamos en el editorial, en El Mundo les dan la bienvenida como no partidarios, mejor dicho, de combatientes de la nación catalana, o sea  que nos encontramos con la balanza descompensada “ab initio”, deseable que las esencias españolas hubieran sido apartadas también, sabiendo de antemano que sólo ha sido un deseo de un soñador, ya sé que el fiel escudero de La Razón, en esas aseveraciones, denominados “puntazos”, nos indican que se ha protegido el “sentido de Estado”, que es lo que le ha venido a faltar también a los cesionistas catalanes, y donde debo resaltar mi gusto, en que La Vanguardia denuncie lo que suponía aprobar a golpe de una lectura y en única lectura de la desconexión, resaltando las similitudes del golpe constitucional del artículo 135 de nuestro texto constitucional, que no haya habido sonoros y rotundas rupturas, ni se haya rasgado las vestiduras, indican la podredumbre, en la cual nos hemos instalado, a tal punto es meridanamente claro, que hoy La Vanguardia nos refleja que “JxSí defiende que la ley de desconexión se pueda aprobar por urgencia”, es decir, se sienten fuertes para seguir dilapidando todo boceto de valor democrático, su editorial  resaltado se titula “Una maniobra impropia”.
En cuanto a la economía, seguimos tristemente en las mismas, sabemos de memoria sus consecuencias, pero si nos acercamos a las portadas, veremos que proliferan poco, pero de cuando en cuando, nos encontramos con unas gotas de agua, en un océano: ““Ahora resulta que ser mileurista es un privilegio”, suspira Antonio, un nombre ficticio. Este vigilante de seguridad no se hace a la idea de que desde febrero los casi 1.100 euros netos que cobraba por vigilar un centro de atención al refugiado (CAR) bajan a algo más de 700 euros. “De repente tenemos que vivir con un 40% menos de sueldo, y resulta que quien nos contrata es el Ministerio de Empleo”, lamenta echándose las manos a la cabeza. Dos compañeros le escuchan en una cafetería de Madrid y cuentan los problemas que van a tener a partir de ahora para llegar a final de mes. (El País: “Empleo barato en el Ministerio de Empleo”; con pocas ganas me deja esto lo que se refleja, en El Mundo, donde se destaca que “los municipios deben devolver la plusvalía cobrada de más sobre 550.000 inmuebles”, un cierto sabor amargo, se ha dibujado en mi rostro.
Ayer Juncker, presentó ayer el Libro Blanco sobre el futuro de la Unión Europea a 27, ya sin Reino Unido, con los detalles de cinco escenarios posibles, con el objetivo de forzar una reflexión sobre el nivel de integración que los Estados miembros están dispuestos a asumir y que tomen posiciones sobre la posibilidad de una Europa a distintas velocidades, y donde El País hoy nos habla que “La UE reconoce su fracaso ante la peor crisis de la posguerra”, mientras que La Razón se sitúa en su mundo de ensoñaciones, donde se limita a decir que “la UE alerta de su desintegración ante la ola nacionalista”, y donde se permite hablar que el Brexit será la rampa de lanzamiento de una nueva Europa (“El Brexit, acicate para la refundación de la UE”); y donde ABC ve en esta oportunidad, la del Brexit, que Gibraltar vuelva  la senda española, así se pronuncia en su editorial (“Gibraltar golpea al ‘Brexit’”), pero nada como el titular leído, en El Periódico, para devolvernos a la cruda realidad, como es que apunta que “Europa reflexiona sobre su futuro sin descartar un retorno al Mercado Común”, lo cual ya sería totalmente un disparate total, pero como nos hemos aficionado a ello, no es talmente descartable; y para rezumar algo más de lo que ocurre en Europa, el papel de Fillon es verdaderamente paradigmático (El País: “Fillon será imputado pero se resiste a abandonar”; El Mundo: “La derecha francesa, en situación crítica por el enroque de Fillon”) y donde este último diario ha merecido un editorial titulado “Fillon: el declive de un candidato que carece de ética”, y donde no podían faltar sendos editoriales sobre Trump, acerca de su intervención en el Congreso, en El País nada ha cambiado (“Trump, en su línea”), en ABC se apuntan ya una redefinición de su postura, donde ahora intenta  navegar entre dos aguas, por lo cual le encarga que debe incorporar a parte de los demócratas, de momento tenemos a los grupos económicos, que de momento, van viento a popa y a toda vela; yo solo quisiera acabar este resumen, en mi día previo a mi finalización  de mi prestación laboral temporal, que alguien hubiera tenido a bien, haber llevado a portada, y no como hoy El País, en pequeño en su faldón inferior izquierdo que “la polución mató a 26.830 españoles en 30 años, casi a mil personas por año, supongo que para muchos esto es una pequeña menudencia, para mi revela cierta cara criminal de esta sociedad capitalista, que tiene tantos jinetes de la muerte, dentro de sí misma.


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