Al calor de las noticias (dos de octubre del 2016)

A estas horas, en que va cayendo la tarde madrileña, comenzamos con el resumen del quiosco, después de una buena comida en compañía de mi hermano, y los dos andamos tristes, creo que, si no se lucha en condiciones, y con organizaciones políticas, que tomen de nuevo las banderas contra la opresión capitalista, veremos, como nuestras vidas solo verán gobernar organizaciones políticas de derechas o de extrema derecha,  siento comenzar con estas palabras, pero que siga luchando, necesito gritar, cuando profunda es nuestra derrota.

Intentando desgranar nuestro quiosco, comenzamos hoy que, en El Periódico, se nos informa que  “El juego de la botella, furor juvenil”; al tiempo que les recomiendo el reportaje sobre el machismo, que habita en este diario, donde la ensayista Rebecca Solnit en nos dice que “las raíces del odio y la violencia contra la mujer están en la cultura en su conjunto”, y es por ello que se hace un editorial titulado “El machismo que no cesa; por su parte, El País, en su suplemento dominical Ideas “La era de la inseguridad en la Red”; donde los articulistas nos hablan de como tendrán lugar los ataques cibernéticos, ya que es evidente, que se sabe, que se van a producir, en cuanto al otro suplemento, el de Negocios,, nos informa que “Los algoritmos se apoderan de la economía”, en tanto que “una compleja gramática de números hace que las empresas conviertan datos en dinero”; siguiendo por el quiosco madrileño, un poco de refugiados, trufado de la inevitable caridad cristiana y melodramáticas crónicas (La Razón: “España acoge a Mohamed, el sirio que no vio al Papa en Lesbos porque tenía las piernas destrozadas”; El Punt Avui: “Con ojos de refugiado”); y donde es preciso decir, que un  diario barcelonés eleva a los altares de la gloria,  la televisión pública catalana (Ara: “Operación salvar TV3”); y que a falta de temas de más enjundia, se conoce, le ha merecido la consideración de hacerle el editorial del día (“TV3: el reto de seguir siendo una historia de éxito).

Saliendo del orbe peninsular, en la esfera internacional, nos encontramos con que se hace referéndum en Hungría, donde unos no quieren refugiados, mientras que la UE los quiere “debidamente regulados”, es decir, que ambas soluciones nos conducen directamente a la barbarie, una de mayor intensidad, otra de menor  (El País: “Los colombianos votan hoy si respaldan la firma de la paz con las FARC”; El Mundo: “El Gobierno de Hungría lanza su órdago contra la Unión Europea”), y que merecen sendos editoriales (El País: “Referéndum demagógico”; El Mundo: “Una vergonzosa consulta en Hungría”), donde como pueden suponer todas las diatribas son para este gobernante de extrema derecha, que curiosamente no se recalca debidamente que este señor es un reaccionario, de tomo y lomo, así se viene haciendo el periodismo de hoy en día; para acabar, contaremos que las relaciones entre dos aliados de oriente medio no atraviesan sus mejores momentos (La Vanguardia “Estados Unidos y Arabia Saudí tensan sus relaciones”), y de ello hace un editorial, titulado “EE.UU. se embrolla con Arabia Saudí”.

Como pincelada final, antes de entrar en la defenestración de Sánchez, quédense con estos datos, leídos en el diario El Periódico, donde se hace constar que España es el segundo país de la Unión Europea con mayor porcentaje de trabajadores con contrato temporal, el 25,4%, superado tan sólo por Polonia, con el 26,5%, y seguida de Portugal, con un 22%, y Holanda, donde este tipo de contratos suponen el 18% del total, según los datos publicados ayer por la Oficina estadística europea Eurostat”, mientras que “en el polo opuesto de esa situación, se sitúan Rumanía, Lituania y Estonia, donde la contratación temporal oscila entre el 1% y el 2,5% (El  Periódico:  “España es el segundo país de la UE con más temporalidad”); lo único que debo añadir, en este punto, es hacerme la siguiente pregunta, una pregunta que algunos no acertarán  a comprender: ¿No existe el mercado de trabajo dual y segmentado en Rumanía, Lituania y Estonia?, seguro que lo sesudos analistas no tendrán respuesta para ello.

Ahora toca centrarse en la reunión del Comité Federal del PSOE se saldó ayer con la dimisión de Pedro Sánchez como secretario general, tras ser rechazada por 107 votos frente a 132 su propuesta para celebrar a mediados de noviembre un congreso extraordinario en el que se elegiría a la nueva dirección del partido, y donde se produjo la elección de la gestora, encabezada claro por los críticos, que ahora deberán tomar la decisión peliaguda de decir sí o no  a Rajoy, que es lo que determinará, en buena parte, el devenir de los socialistas, en el futuro cercano, y donde el quiosco madrileño, fieles en las portadas y editoriales de esta  ‘semana trágica’ del PSOE, donde redoblan este domingo la demanda a los nuevos responsables del partido socialista de facilitar el Gobierno de Mariano Rajoy para evitar unas terceras elecciones generales;  nadie , en estos rotativos esconde su satisfacción por la dimisión de Pedro Sánchez, abatido por los críticos, pero de nuevo es El País el que más duro golpea al ya exsecretario general del PSOE

Todos los diarios se hacen eco de la dimisión de Pedro Sánchez en su portada y de las consecuencias que su renuncia acarrea, con titulares a toda página, donde El País titula que  “Pedro Sánchez dimite y deja un PSOE más dividido y derrotado”; El Mundo señala que “Los críticos tumban a Sánchez en un bochornoso Comité Federal”; por su parte, en su portada, ABC señala que “Un PSOE devastado dice no a Sánchez”, añadiendo que “los críticos tumban a su líder tras un Comité agónico”, y finalizamos el viaje madrileño, en La Razón que subraya que  “El PSOE echa a Sánchez”, así como que los “los críticos recogieron avales para una moción de censura que les vetaron”. En cuanto a la prensa editada en Cataluña, El Periódico titula: “Sánchez dimite y los barones se imponen en un PSOE roto”, con este gran titular en portada “K.O. a Sánchez”, añadiendo en el subtitular que fue una “jornada dramática para el PSOE”, en tanto que “el partido exhibió una fuerte división interna en un pulso que tuvo momentos de fuerte tensión”, de otro lado La Vanguardia refleja que “Sánchez dimite y los barones se imponen en un PSOE roto”; mientras que Ara destaca que “Los ‘barones’ fulminan a Sánchez”, y concluimos, con que en El Punt Avui se nos dice que “Pedro Sánchez pliega de un PSOE destripado”,

Ahora toca destripar los editoriales, y como ya decíamos el más duro en El País, titulado “La hora de la unidad”, el diario de Prisa insiste en culpar a Sánchez de todos los males de la crisis socialista, incluida la fractura de la formación. Achaca al dimisionario un “intento de pucherazo” en el comité federal del sábado y denuncia su “incapacidad para unir el partido” y para “construir un liderazgo abierto e incluyente y sumar a sus críticos a un proyecto ganador”. El artículo editorial, que hace responsable a Sánchez de “llevar al partido al caos y al descontrol, y por su supuesto, en ningún momento hace mención a los críticos, barones y, por supuesto a Susana Díaz.

Algo menos beligerante, es el editorial leído en El Mundo, que admite en su editorial que “Sánchez tira toalla tras un cerco implacable de los críticos”, es decir, aclara, por la guerra declarada de Susana Díaz y los barones. A juicio de este rotativo, ni la dirigente andaluza ni los barones tendrán fácil cambiar el ‘no’ socialista a Rajoy, ya que el rechazo al líder del PP es lo que reclaman la mayoría de los militantes. Sin embargo, el editorial insiste en la postura defendida por el rotativo: “Desde estas líneas, seguimos creyendo que lo mejor sería que el PSOE facilitar la gobernabilidad y optara por abstenerse, permitiendo la investidura de Mariano Rajoy”.

Una buena decisión para el PSOE, titula abiertamente el editorial de La Razón, en su sostenida defensa de Rajoy, el rotativo defiende que “dirigentes como Susana Díaz, García Page, Fernández Vara o Tomás Gómez tienen el deber de enmendar el rumbo equivocado”. “El primer objetivo solo puede ser permitir que el partido que ganó las elecciones generales, el PP, pueda formar Gobierno”. Acto seguido anima al PSOE recomponer y recupera el partido: “España no puede permitirse el lujo de que la extrema izquierda expropie el espacio ideológico y electoral de la socialdemocracia”.

Finalizamos el quiosco madrileño, con el de ABC, titulado “Sánchez dimite, pero deja roto al PSOE”, donde realiza afirmaciones como estas: “El PSOE es hoy un partido sin vida, víctima del frentismo que inoculó Zapatero y que Sánchez ha cultivado con esmero”, al tiempo que nos dice que “España necesita que el PSOE se recomponga y vuelva a elegir el camino de la moderación y la responsabilidad, porque lleva demasiado tiempo perdido en un laberinto dañino”

En Barcelona, destaca la contundencia de su editorial de La Vanguardia (“La dimisión de Pedro Sánchez”, en el ataque contra Susana Díaz: “[Sánchez] ha sido derrotado de forma innecesariamente brutal por la potente nomenclatura de la organización, de espaldas a los militantes y mediante los tejemanejes de la presidenta andaluza -cuyo torpe manejo de los tiempos sigue siendo una de sus características-, y que a Sánchez, desde que fue elegido, no se le otorgó legitimidad ni capacidad de liderar el partido”. De otro lado, en El Periódico, titulado “La autodestrucción del PSOE”, donde subraya que “El PSOE, y por extensión la izquierda española, vivió ayer una de las jornadas más negras de su historia, y donde hace constatar que “si la izquierda estaba ya fracturada en dos espacios tras la aparición de Podemos, lo que comportaba la necesidad de pactos entre ambas fuerzas para desbancar al PP, ahora la implosión del partido socialista puede debilitarlo como alternativa, al menos en el medio plazo; y concluimos con el editorial, en El Punt Avui, en donde lo único de interés, es el titular del mismo: “Despropósito del PSOE. Rajoy, a punto”

Y ya desbrozando los últimos titulares, en el quiosco barcelonés, se recogen las declaraciones en una televisión portuguesa, lo que le permite titular, en El Punt Avui, que destaca que “Puigdemont no cree que España se desestabilice”, por lo que ocurra en la posible secesión catalana.

Pero he dejado este titular, leído en El Mundo, y su crónica, para que los notables críticos y analistas políticos valoren bien la situación, y que para nada la cuestión es investidura sí o no, sí que lo que ocurre, es que el PP desea carta blanca en su futuro gobierno, es lo que nos cuentan hoy, en tanto que se resalta que al  PP no le valdría ya solamente con que el PSOE le facilitara mediante su abstención la presidencia del Gobierno, pidiendo, en consecuencia garantía de gobernabilidad, es decir, apoyo suficiente como para asegurar la estabilidad del Gobierno, y aquí viene el broche final, en caso de no obtenerlas, previsiblemente el candidato del PP no consideraría factible la investidura porque conduciría a la formación de un Ejecutivo sometido a continuos vaivenes e incapaz, muy probablemente, de aprobar los Presupuestos Generales del Estado (El PP exigirá al PSOE que dé garantías para la gobernabilidad”); por lo cual el PSOE en estas circunstancias se enfrentaría a un grave dilema porque con una gestora no tendría candidato para acudir a las urnas, que sería la consecuencia de no aceptar las condiciones del PP, con lo que se intentara “obligar” a que se acepten, entre otras cosas, los presupuestos, en fin que le sepa bien el manjar conseguido, donde Rajoy y González estarán  celebran do su triunfo, con la consabida fumada de su puro, pero que no olviden una cosa, un golpe palaciego es un golpe, o sea, que no fue un día n para la izquierda y la actividad política, las cenizas de sus puros queman y hacen cenizas a toda alternancia, eso es lo que se tiene cuando en sus bocas, se les llena tanto hablar de España, que lejos nos encontramos de una futura esperanza, en el medio plazo.