Al calor de las noticias (veinte de septiembre del 2016)

Era de esperar el quiosco de hoy, tan del gusto de los esquemas esenciales nacionales, todo a propósito de la comparecencia judicial de Homs, que oscurece totalmente la investidura del próximo presidente, y sin que nadie ose patinar contra las organizaciones políticas, que han optado, por una suspensión de facto, hasta que se conozcan los resultados electorales del próximo domingo, tal dislate, debería llevar aparejado la dimisión de todos los dirigentes, pero ya saben, los lectores, que el verbo dimitir es de muy difícil conjugación por estos pagos es preciso aplicar unos torniquetes tremendos, para que dicha contingencia se produzca, a renglón seguido demos decir, que de las cuestiones internacionales, se centran en la detención del estadounidense, que puso la bomba en Nueva York, y acabaremos este viaje al quiosco, con una pequeña aproximación a una sentencia del TJUE, acerca de la no discriminación en las indemnizaciones entre interinos y los que tiene contratos indefinidos, que requiere una amplia explicación, tendente a no caer en la trampa de los futuros leguleyos, que traten de desvirtuar lo que dice esta sentencia.

Ya metidos en la harina de las portadas del quiosco, vamos a destacar, en primer lugar, que El Mundo sigue haciendo seguimiento del asesinato múltiple en un pueblo de Guadalajara (“Los asesinos de la familia de Pioz querían ‘mandar un mensaje’”); al tiempo que nos reseña que “una niña crea una ‘app’ para que su abuela con Alzheimer no la olvide”; al tiempo, que, en La Razón se  hace crónica sobre una niña, que sirve de pretexto para recordar fondos para combatir la leucemia ( “Alba, la esperanza de encontrar fondos contra la leucemia”),; pero volviendo los pasos al quiosco barcelonés, destacamos, que, hoy se nos dan dos prismas sobre la oferta de pisos turísticos en Barcelona, donde La Vanguardia prefiere destacar que  “Barcelona cierra 71 pisos turísticos”; mientras que, en El Periódico, nos dice que existe  “1.500 pisos turísticos ilegales en BCN”; y donde hoy se nos habla que existe un conflicto entre padres y madres por el uso de las fotos de menores en las redes sociales (El Periódico: “Divorciados en guerra por fotos de los hijos en la red”; y concluimos, con que, en un editorial de La Vanguardia se hacen cantos por la vuelta de una escultura, que necesariamente va a viajar ahora a EEUU (“‘Carmela’, Plensa y Barcelona”).

Ayer empezó una cumbre sobre los refugiados, al amparo de la apertura de las sesiones de la Asamblea General de la ONU, donde ayer el Rey Felipe VI pidió ayer responder con generosidad a los grandes desplazamientos de refugiados y migrantes, a los que, según dijo, hay que prestar apoyo “para que puedan llevar una vida digna” y quienes, a su vez, han de respetar “los valores que deben ser observados en los países de acogida”, en fin puras palabras hermosas, pero de claro contenido utópico, en tanto que no concuerda, con la voluntad política de los actuales dirigentes mundiales, eso sí en las portadas, expresan su admiración por las palabras del monarca (La Razón: “El Rey insta a respetar los valores de los países de acogida”; La Vanguardia: “El Rey pide en la ONU generosidad con los refugiados”), pero son los propios diarios, los que nos dan la razón, cuando profundizando en las medidas concretan, nos vienen a decir, como El País, que  “Los Gobiernos evitan asumir compromisos en la cumbre de la ONU sobre refugiados”; y  que, según ABC, “la ONU deja en el limbo a 65,3 millones de desplazados”, mientras que La Vanguardia,  señala, en páginas interiores,  que “la ONU se queda corta en su intento de aliviar el drama de los refugiados”, pero hete aquí, que con este bagaje, hay editoriales, que te dejan literalmente a cuadros, hoy nos lo proporciona La Razón, cuando nos titula que “El mundo se compromete con los refugiados”.

De otro lado, hoy en el quiosco, se nos cuenta que Ahmad Khan Rahami, un estadounidense nacido en Afganistán, detenido ayer como sospechoso de la colocación de varios artefactos en Nueva York y Nueva Jersey, fue posteriormente acusado de cinco cargos de intento de asesinato de un agente de policía por el tiroteo en el que fue capturado (La Razón: “Detenido el sospechoso de poner las bombas en Nueva York”; La Vanguardia: “Cae el sospechoso de las bombas de Nueva York y Valencia”; El Periódico: “Cae el presunto terrorista de Nueva York”; Ara “Detenido un hombre de origen afgano por las bombas de Nueva York”); al tiempo que, en El Mundo, se centra en la reacción del presidente ( “Obama culpa al IS de la ola de atentados”); por parte del diario El País, se hace editorial, elogiando la reacción de las autoridades, aconsejando que no se haga de ello arma electoral (“Reacción acertada en EEUU”); y dentro de este mismo diario, se pronuncia sobre los resultados en las elecciones berlinesas, donde nos dice que “la sonora derrota de la CDU en Berlín confirma la consolidación extremista (“Populismo alemán”), mientras que, en ABC se  muestran preocupados (“Aviso alemán a Europa”), pero sorprendentemente, no se adentran, en ningún momento, en que la situación se produce a partir, de lo que hace Merkel en estos años, y no solo con el asunto de los refugiados, en tanto que se evidencia un profundo malestar social, en donde el miedo atenaza a muchos, pero para estos señores, estos sucesos parece que so lluvia caída del cielo, en fin, sigamos mirando con esos ojos, y veremos como los cuervos nos sacarán los ojos; acabamos este viaje, mencionando el editorial de Ara, que se centra en la victoria de Putin en las elecciones en la Duma (“Manos libres para el putinismo”)

Ahora toca contar el gran hilo conductor del quiosco de hoy, es decir, la comparecencia judicial de Homs, donde gran parte del quiosco madrileño levantan sus espadas, por todo lo alto, para evidencias su malestar, con sus habituales titulares, que son al tiempo auténticos editoriales, con los típicos rasgamientos de vestiduras: “Homs convierte su defensa en un ataque insolente a los poderes del Estado” (ABC); “Desafío total a la justicia. Circo independentista a las puertas del Tribunal Supremo” (La Razón), y “El nacionalismo catalán lleva su desacato a las puertas del Supremo” (El Mundo).

Y los tres ofrecen editoriales a juego; el de El Mundo es el más templado (“El 9-N fue un desacato a la ley, no un acto democrático”), donde destaco que dice que “ningún parlamento autonómico puede situarse al margen de la legalidad”, denunciando tanto el “victimismo” y considerar “inadmisible” e “irresponsable” se presente un proceso judicial como un ataque a la democracia; por su parte La Razón defiende que este es un proceso judicial políticamente aséptico; arremete contra “circo mediático” montando ayer en Madrid, y que quieren romper con el principio de igualdad ante la ley .de todos los españoles. (“Los líderes catalanes no pueden estar al margen de la ley”), y concluimos con ABC, que, entre calificativos, retuerce la interpretación, llegando a negar la legitimidad política al imputad (“Homs asume que delinquió el 9-N”, en el texto se lee que el 9-N fue una “farsa”; que lo de ayer de Homs fue “una grotesca sobreactuación”, “la teatralización de un fraude”; y su alegato de defensa “simplista, demagógico y cínico”.

De otro lado, hoy, El Periódico aporta una primicia, como que Homs declaró ante el juez del Supremo que un miembro del Gobierno de Rajoy contactó previamente con Mas para ofrecerle un pacto: si Mas no comparecía para valorar el resultado el mismo 9-N el Ejecutivo central no emprendería ninguna acción contra la Generalitat (“Homs alega que Rajoy ofreció un 9-N tolerado”), haciendo de ello su correspondiente editorial (“La declaración judicial de Homs por el 9-N”) valora esa oferta de pacto tácito y concluyendo que es imprescindible realizar un referéndum pactado y vinculante. 

El resto de diarios coinciden en titular en primera con la afirmación de Homs de que el pronunciamiento final, el fallo de la sentencia, ya anda escrita, debiendo hacer constar, que, en ninguno de ellos se hace pronunciamientos editoriales (El País: “Homs, tras declarar en el Supremo: “La sentencia ya está dictada”; La Vanguardia: “Homs: “La sentencia ya está dictada”; Ara: “Homs: La sentencia ya está dictada”; El Punt Avui: “La sentencia ya está dictada”).

Debiendo destacar que, siguiendo las cuitas catalanas, hoy La Vanguardia destaca, como gran titular que “El Partit Demòcrata Català añade 'Europeu' al nombre”; al tiempo que, en Ara, nos informa que “La mayoría del TC quiere rebajar el poder sancionador que le otorgó el PP”; y donde en, en El Punt Avui  se hace entrevista a Iceta, que tiene a bien lucirse con su gran mantra: “Ni inmovilismo ni unilateralidad llevan a ninguna parte”; pero sin duda la otra gran noticia del día de hoy, en el quiosco barcelonés que la Generalitat valenciana y la catalana acordaron ayer normalizar relaciones entre ambos gobiernos autonómicos tras “mucho tiempo de incomunicación injusta”, que “ha perjudicado gravemente a catalanes y valencianos”. Así lo indicaron en rueda de prensa los presidentes Ximo Puig y Carles Puigdemont, que se reunieron ayer en Valencia para abordar intereses comunes, participar en la cumbre del Foro Valenciano por el Corredor Mediterráneo y firmar un convenio de colaboración entre las dos autonomías en materia de turismo (La Vanguardia “Puigdemont y Puig unen fuerzas entre Catalunya”; El Punt Avui: “Deshielo histórico”), como pueden suponer algunos editoriales, donde todo son loas, incluso se la califica de histórica, lo cual supone correr mucho  (La Vanguardia: “La urgencia del corredor mediterráneo”; El Periódico: “La conexión mediterránea”; El Punt Avui: “Una reunión histórica en Valencia”).

Antes de transitar por los caminos de la investidura, en tiempos de suspensión, por incomparecencia de los dirigentes, más interesados en lucir su palmito en mítines y televisiones, donde solo necesitan soltar sus constantes mantras y consignas, debo hacer constancia, que en, en la entrevista, en El País, a Íñigo Urkullu, se le destaca esta frase: “La independencia en el siglo XXI es hablar de imágenes del pasado”.

Más ahondando en las páginas interiores, contemos que Rivera aconseja a Sánchez que escuche primero a los barones socialistas; por su parte, El País apunta que Pedro Sánchez quiere posponer al máximo su llamada a Albert Rivera ante la posibilidad de que los casos de corrupción del PP le lleven a considerar la imposibilidad de propiciar un Gobierno de Mariano Rajoy; y con respecto al otro partido emergente, Echenique tuvo que salir al paso de unas declaración de Ramón Espinar, para dejar claro que no hay conversaciones entre los podemitas y socialistas, ocasión que sirvió para soltar la consigna podemita, expresar sus lamentos por la nula voluntad del PSOE de pactar con ellos; por otro lado, La Razón refleja que “Rajoy esperará al Comité Federal del PSOE para mover más fichas”. El diario añade que tras las elecciones del domingo se ratificará de nuevo en su empeño de llegar al Gobierno.

En otro orden de cosas, El Mundo destaca que PP y PSOE deciden no presentar una proposición conjunta y se suman a la iniciativa de UPN para que en el caso de que se celebren nuevas elecciones se adelanten el 18-D. “PP y PSOE se esconden tras UPN para no votar el día de Navidad”, que es el titular de su portad; pero más importantes son las interesantes aportaciones, que se hacen hoy, en el sentido de las presiones, que se lanzan del quiosco madrileño, de un lado el dolor de Juncker, que nos amenaza con quitar los fondos, en lo que nos detendremos más adelante (El Mundo: “La amenaza de Juncker: ‘Si España falla no dudaremos en suspender los fondos’”; mientras, en El País, lanza un titular en portada, donde hace un  canto a los tiempos pasados, añora los tiempos del bipartidismo, y para ello usa que “Políticos, escritores  e intelectuales perciben el fin del bipartidismo como un paso atrás” (“América mira perpleja la parálisis de España”

Y ya comenzando a escrutar los mundos económicos, en El Punt Avui, se nos recuerda que ya  hace un año que el escándalo de la bandera automovilística alemana salto a la palestra (“Volkswagen, un año después del ‘dieselgate’”), recordando que, con respecto a la secuelas europeas, ni se espera de momento una resolución ejemplar por lo acontecido, andamos en una profunda nebulosa; pero veo con dolor, al tiempo, que la conclusión del juicio oral por las preferentes de Caja Madrid ha concluido, y donde solo un periódico, nos da cuenta de ello (El Periódico “El juicio por las preferentes de Caja Madrid queda visto para sentencia”), concluyendo con que, en El Mundo, se hace un canto a la firma del tratado TTIP, criticando las escaramuzas de estos últimos tiempos (“Una batalla que no beneficia ni a Europa ni a EEUU”.

Y ampliando la noticia, en la que hablamos de Juncker, digamos que  se recoge que la Comisión Europea no desea en este momento “recomendar la imposición de multas a España y Portugal, siempre que estos dos países se embarquen en la toma de medidas para reducir el déficit en la segunda mitad de 2016 y en sus anteproyectos de Presupuestos para 2017” pero “si fallan, la Comisión no dudará en recomendar la suspensión parcial de los compromisos financieros vinculados a los Fondos Estructurales y de Inversión previstos para estos países”, se nos informa que consta en el acta de la reunión del Colegio de Comisarios del pasado 27 de julio, que ha sido publicada ahora por la Comisión Europea, así que se vayan preparando los contendientes electorales, que la cosas vienen con las espadas en todo lo alto..

Y concluimos con una noticia, que cuando escuche la música me gustaba, pero, en la medida, que vamos leyendo, entrevelando, y viendo la correlación de fuerzas, puede ser el paso previo de un desastre  total, lo digo a cuenta de una sentencia del  Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) ha establecido en una sentencia que los trabajadores interinos tienen derecho a percibir una compensación al rescindir su contrato y defiende que las indemnizaciones por despido deben ser iguales para todos los trabajadores, ya sean fijos o temporales; esta sentencia responde a  que una trabajadora interina contratada por el Ministerio de Defensa español para cubrir el puesto de una liberada sindical, al ser suprimido este puesto, por un decreto de recortes de personal, en el año 2012, la trabajadora fue despedida,  y donde según la legislación española, la indemnización para los trabajadores indefinidos es de 20 días por año trabajado, para los temporales entre 8 y 12 días por año de servicio y nada en el caso de los interinos (El País: “La justicia europea defiende igualar a fijos y temporales en las indemnizaciones”; El Mundo: “El Tribunal de la UE equipara los despidos de fijos y temporales”)

A la luz de lo que nos cuentan, este que le escribe, a la luz de sus escasos conocimientos de la legislación laboral, pero echando mano de mis experiencias y curiosidad es preciso hacer una serie de puntualizaciones, en primer lugar, dicha sentencia se debe inscribir solo en los contratos de interinidad, en tanto que los contratos a término, o temporales, como los conocemos en España, amparados en el artículo 15 del vigente Estatuto de los Trabajadores, que son los denominados causales, se encuentran fuera del Acuerdo Marco, ya que Directiva, que ha amparado tal situación, se refiere a la igualdad de condiciones de condiciones de trabajo entre indefinidos y temporales siempre que se dé el requisito de realizar un trabajo “idéntico o similar”; y , que como consecuencia de esta equiparación, en las condiciones laborales, incluye la  incluye la indemnización por extinción del contrato de trabajo por causas objetivas, en este caso por la amortización de un puesto de trabajo, es decir una cuestión objetiva, ajena en consecuencia, a los despidos disciplinarios, en consecuencia de lo dicho, lejos andan de la realidad, aquellos que van al tope máximo de una indemnización, en esta caso el limite viene a ser de 20 días, doce días en los temporales y ninguno en el caso de la interinidad, en definitiva, este es el extremo, sobre el que se pronuncia la meritada sentencia.

Supongo que ahora vamos a asistir al pronunciamiento de meritorios leguleyos, y dado como anda el estado de cosas, se nos colara el debate del contrato único,  no tengo la menor duda de ello, vistas las circunstancias que nos movemos, siendo preciso constatar, que las organizaciones políticas, hasta este preciso momento, ni siguiera han dicho esta boca es mía, no deja de sorprenderme, pero es preciso constatarlo, para comprender el profundo dislate, en el cual vivimos, veremos que derroteros toman, y como los tribunales españoles reaccionan, y como puede afectar a la evidente discriminación entre las indemnizaciones a trabajadores temporales (los del artículo 15) y los indefinidos, que es evidentemente, harina de otro costal, así que toca esperar, una vez más, suponiendo que el silencio se rompa alguna vez, por parte de nuestros sesudos dirigente, “tan preocupados” de los problemas de los trabajadores, así que les dejo tiempo a mis lectores, para que reflexionen sobre esta cuestión, y espero no haberles aguado a algunos sus alegrías.