Donde van las sendas de mi vida (poema propio)

Donde van las sendas de mi vida,

donde vamos tú y yo,

para nosotros,

ser yo y tú.

Donde me llevarán

estos caminos de pedregales

No sé dónde me llevarán mis pasos,

busco algo y

tú me lo vas dando,

creo que así

mi camino encontraré.

Estas esperas tan largas,

preguntándome quien soy,

preguntándome quien eres,

preguntándome lo que nunca seremos.

Quiero contarte, por eso,

esta vida mía,

en forma de poema,

todo lo que tú

me andas preguntando.

Sé que te puedo decir

Que nadar no sé,

siempre mojado estoy,

Mi vida fue

huida de mí mismo,

por  eso contigo

me ando encontrando,

sólo soy un artesano de palabras,

entrelazándolas,

pero aún  no se

como lo hago

en este único idioma,

que es el único

que te puedo hablar.

quisiera ser Machado,

Lorca, Alberti, Hernández,

pero mis torpes palabras

jamás llegarán

al fulgor que ellos alcanzaron.

Llevo sobre mí

la historia de los oprimidos,

pero jamás encontré

las tumbas de mis antepasados,

una tupida niebla

ha oscurecido sus tumbas,

no quieren que conozca su dolor,

para así no poder

transmitir el dolor

de mis semejantes.

No sabiendo nada de la muerte,

ando luchando

contra increíbles monstruos,

me siento naufrago,

mas una barca encontré

quiero cabalgar en caballos,

que me hagan saltar

los océanos de la vida,

y cantar al amor,

como hizo Neruda,

que mis pasos en esta vida

marcados queden los caminos,

con estas pesadas botas

que la vida me trajo,

marcado quede

por la huella del esclavo,

mercancía soy,

mercancía no quiero ser.

quiero tener un barco,

que me haga recorrer

los ríos más recónditos,

los ignotos mares

que el alma humana

jamás recorrió,

para buscar un tesoro,

que redima esta humanidad,

en la que la barbarie

enseñoreándose está.

Quisiera buscar

el Dios de este mundo.

las religiones consiguieron

apagar sus luces,

sólo conozco

las tristes historias

que al fuego de una lumbre

me contaron  mis antepasados

queriendo ser un triunfador,

convertido estoy

en otro esclavo

que vender su fuerza tuvo

para poder sobrevivir,

aprendido a sufrir,

testigo quiero ser

para que futuras generaciones,

por eso este mi canto a ti, para

que leas este poema,

y no lo olvides.